VÍDEO BLOG #Miedodequé?: Los que llevan toda la vida falseando informaciones políticas ahora se han dado cuenta, ahora, de que hay que luchar contra el bulo, justo cuando se lo ha dicho Pedro Chapote, por Víctor J. Hernández Bru.
Cada día que pasa me asombro más del paupérrimo nivel intelectual, cultural y profesional que está alcanzando esta sociedad, de la mano de las penosas manipulaciones de la izquierda y de su afán por politizarlo absolutamente todo. No es que me haya acostumbrado, ni mucho menos, a que crezca el número de analfabetos funcionales que viven creyéndose todo lo que les inyecta la izquierda a cambio de sus votos, pero en un país que llevan maltratando su sistema educativo y colocando bajo cero sus niveles de exigencia cultural, es bastante normal que cada día sea más fácil adoctrinar a la masa.
Pero comprobar cómo el periodismo, del que ya hablaba la semana pasada en este humilde #VídeoBlog, ha llegado a estos niveles de zafiedad en la manipulación es francamente descorazonador.
Después de que Pedro I El Falso-Pedro Chapote se haya reído de los propios y por supuesto también de los extraños con su numerito de los cinco días de rascarse la mandanga a cinco manos para acabar donde estaba, y que la conclusión de todo ello es que los jueces son muy malos y que al periodismo hay que controlarlo porque manipula y lanza bulos, ahora muchos borregos periodísticos han salido despavoridos a proclamar en sus respectivos canales que sí, que hay que controlar al periodismo.
No se habían dado cuenta hasta ahora. Vivían los pobres, engañados, pensando que el periodismo era un quehacer puro y limpio, que la objetividad bañaba a todo humano que traspasaba el dintel de la puerta de un medio de comunicación convirtiéndolo en un ser de luz, en un querubín de la información. Y, afortunadamente, ha venido Pedro Chapote a iluminarlos con su infinita inteligencia y bondad, para que caigan en la cuenta de que los medios de comunicación están más comprados que ellos mismos.
Y salen, tíos como castillos, que llevan décadas trabajando en esto de informar, algunos ya incluso jubilados, a proclamar que esto es una vergüenza, que hay que distinguir información de opinión, a proclamar que el periodismo está muerto y a aplaudir la barbaridad totalitaria ésta de un presidente cada día con más cara de Perón, cada día con más cara de Maduro, de Fidel Castro, de Stalin, de Xi Yinping, cada día con más cara de Hitler, de establecer leyes de censura de prensa, cuando nuestra constitución y nuestra ley establecen perfectamente qué hay que hacer con quienes se inventan las noticias o las tergiversan en función de lo que interesa a su partido preferido o, lo que es peor, a su ideología preferida.
Y resulta que todos estos ‘San Pablos’ del periodismo del siglo XXI, que acaban de caerse del caballo cegados por la luz de su líder, Pedro I El Falso, son los que se han tirado años aplaudiendo trolas como la de que había que hacer triunfar una moción de censura porque Rajoy era un corrupto, ovacionando los linchamientos públicos de Rita Barberá, Díaz Ayuso, aquel presidente murciano dimitido Pedro Antonio Sánchez, que luego resultó inocente de lo que le acusaban, Paco Camps o muchos otros; los mismos que han sembrado de portadas con acusaciones contra Gabriel Amat que luego resultaban falsas, mientras tapaban los escándalos del Caso Facturas y protegían al expresidente de la Diputación socialista encarcelado.
Y todo ello para hablar de supuestos bulos, sin ser capaces de enumerar absolutamente ninguno. Porque todos éstos, algunos de ellos en medios de Almería, que llevan una semana hablando de bulos, de regeneración democrática, de informaciones falsas y de control al periodista, no han sido capaz de citar ni una sola noticia falsa en torno al presidente del gobierno y a su esposa, alguna noticia que se haya publicado y sea tan absoluta y rotundamente falsa como ésas que acabo yo de enumerar, con nombres y apellidos, sobre dirigentes del PP y que ellos publicaban o aplaudían sin disimulo en sus medios.
Chicos, ¿no os dais cuenta de que ya no engañáis absolutamente a nadie más que a los vuestros, que están deseando ser engañados? ¿No comprendéis el ridículo imperial de hablar de todo esto ahora, copiando y pegando el discurso del tío que más nos ha mentido en los últimos 45 años de nuestra política? ¡¡¡Pero vosotros qué coño vais a comprender… si no sois más que carnés de partido con patas y pluma!!!
