VÍDEO BLOG #Miedodequé?: El demoledor informe de auditoría que desvela presuntos delitos y un brutal despilfarro en el Ayuntamiento de Garrucha con el PSOE, por Víctor J. Hernández Bru.
Francamente demoledor es el informe de auditoría firmado por la consultora Kreston, bajo encargo del actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Garrucha, en manos del PP y los ex concejales de la formación de izquierdas Con Andalucía.
El informe revela no sólo la utilización de un crédito bancario para maquillar una situación ruinosa de las cuentas, sino además la existencia de presuntos fraudes de ley en proceso de contratación, tanto de empleados públicos como de empresas proveedoras.
Kreston apunta a la obtención de un préstamo de 3.71 y al ingreso anticipado del canon por el servicio de aguas por valor de 4, para convertir un déficit de tres millones en un superávit de 4.72. Estos movimientos han convertido un remanente de tesorería de 1.60 millones a favor del consistorio en una cifra real de remanente negativo de 3.27 millones, lo cual provoca una deuda de 327 euros por vecino. En general, la deuda a cierre de 2022 es de casi siete millones de euros, a casi 700 euros por vecino.
El consistorio ha llegado, según Kreston, a esta ruinosa situación debido a que se ha implantado con total fidelidad la política de despilfarro típicamente socialista, basada en la idea que ya esbozó con claridad la entonces ministra Carmen ‘Calva’, de que “el dinero público no es de nadie”.
Así, el gasto de personal del Ayuntamiento paso en tres años, del 19 al 22, de 3.32 millones a 5.66, un incremento de 2.3 millones, o sea, un 70% más. El informe detecta, en relación con ello, contrataciones discrecionales, o sea, a dedo, que califica como “incumplimientos legales cometidos por el anterior equipo de gobierno”, con adjudicaciones de contratos sin el procedimiento de contratación adecuado, empresas que repetían en el procedimiento de contratación mientras que otras nunca eran beneficiarias y contrataciones de personal sin seguir el orden de las bolsas de empleo o incluso de personas que no estaban inscritas en ellas, llegando a ser fijas con el tiempo.
Serán los tribunales quienes decidan hasta qué punto hay delitos escondidos tras estos comportamientos que refleja el informe de Kreston, pero en caso de que todo esto se demuestre judicialmente, no estaremos sino ante un caso más de la pura filosofía socialista: gasto desbocado, enchufismo sin límite y endeudamiento galopante para que luego venga otro partido a apretar cinturones y a solucionar papeletas.
¿A alguien podría asombrarle? Insisto en que no conozco ni un solo caso de ayuntamiento que, tras un gobierno socialista, no haya quedado absolutamente endeudado. Repito: pura filosofía socialista.
