VÍDEO BLOG #Miedodequé?: El PSOE en general y el de Níjar en particular siguen pensando que vale todo: culpar al rival de las medidas que tú mismo has aprobado, por Víctor J. Hernández Bru.
Hace ya mucho tiempo que los ciudadanos de a pie nos hemos percatado que en la política campan muchos especímenes que están absolutamente persuadidos de que tienen derecho absolutamente a todo, de que todo vale, de que nosotros, los contribuyentes somos todos absolutamente imbéciles y nunca vamos a caer en la cuenta de sus trolas, tropelías timos, manipulaciones y cuentos chinos en general.
La descripción se adapta especialmente bien en el espectro de la izquierda, donde no se recuerda ni un solo ejemplo de labores de gobierno o incluso de oposición en el que no haya habido, digamos incidencias de cualquier tipo, que se hayan terminado traduciendo en ruina y perjuicio para los administrados.
Ahora bien, de un tiempo a esta parte la trola se ha convertido en la piedra angular de la acción política de la izquierda en general y del PSOE en particular, sin duda con el ejemplo de su líder, Pedro I El Falso, Pedro Chapote, como ejemplo a seguir e imitar.
Nadie que siga habitualmente nuestro trabajo en esRadio Almería podrá sorprenderse del indigno e intolerable comportamiento del PSOE de Níjar y de su líder, Esperanza Pérez Felices, desde un tiempo a esta parte conocida como Esperanza Perdida. Y digo que a nadie sorprenderá, porque no por censurable, el comportamiento en este nuevo caso no deja de ser su patrón habitual de actuación.
En este caso, doña Esperanza, que dejó de gobernar hace apenas dos meses porque los nijareños comprendieron a la perfección que un municipio con los recursos y posibilidades de Níjar no podía seguir ni un solo día más anclado en el socialismo y la ruina que éste conlleva habitualmente, pero antes de marcharse dejó tras de sí una estela de comportamiento absolutamente intolerable, como por ejemplo abandonar la acción de gestión del gobierno municipal una vez conocidos los resultados electorales, cuando aún quedaban dos semanas para el traspaso de poderes, dejando el ayuntamiento casi a la deriva.
Ahora, doña Esperanza ha tenido el pétreo rostro de presentarse en el pleno del Ayuntamiento para quejarse de que éste ha tomado la medida de aumentar las tasas de las actividades deportivas del verano, cuando la cruda realidad, la realidad constable no sólo por parte de los responsables de la empresa municipal adjudicataria de esos servicios, la realidad que se puede testar y comprobar en las actas y documentos municipales es que fueron ella y su propio equipo de gobierno quienes aprobaron esa subida de tasas antes de marcharse del gobierno.
Cuando un gobernante es capaz de culpar al rival político por los efectos de una medida que ha tomado él mismo, queda muy clara la incapacidad del mismo para recibir ningún tipo de confianza por parte de la ciudadanía. Pero cuando dicho gobernante ha estado durante ocho años al mando de una institución pública, la inquietud la provoca el pensar qué tipo de tropelías habrá cometido en dicha trayectoria.
Ainssss, ‘Esperanza Perdida’.
