VÍDEO BLOG #MIEDODEQUÉ?, por Víctor J. Hernández Bru.
No se le han puesto demasiado bien las cosas el Partido Socialista en esta recta final de campaña. Y seguramente, lo mejor que le puede pasar al PSOE es precisamente eso, que se acabe la campaña, porque las cosas van como en ese partido en el que el rival te va ganando 4-0 y tú piensas que si no se termina pronto la cosa, lo más probable es que la cifra se termine elevando a 8.
Es lo que tiene cuando se gobierna pensando que el cortijo es tuyo y que las normas las pones tú y no la gente que te ha votado, incluso la gente que no te ha votado, pero que tiene el mismo derecho que los otros a que gobiernes pensando en sus legítimos intereses.
A estas alturas de la película ya no cabe ninguna duda de que el peor enemigo del PSOE es el ego de Pedro Sánchez, que le lleva a dictar normas que se saltan la más básica legitimidad, principios irrenunciables como el de la igualdad de oportunidades o el respeto a la Constitución, a pesar de lo cual sigue pensando que es invencible.
Pero invencible no hay nadie, querido Pedro, y hoy por hoy la única duda reside en saber si la factura a tan irresponsables posicionamientos te la van a pasar ya el domingo o no dará tiempo y tendrá que ser en las siguientes elecciones, que si el que gana en éstas eres tú, seguramente no tardarán mucho en llegar.
Es lo que tiene, repito, dejarse uno dominar por su mayúsculo e irrefrenable ego, hasta llegar a decir que la fiscalía depende del gobierno y que tú eres el responsable de traer de regreso a Puigdemont; hacer que tu ministro de Cultura afirme que todas las propuestas electorales de Vox son inconstitucionales; enviar a tu can de presa, Adriana Lastra, a afirmar que todo el que no piense como tú es fascista; desenterrar a Franco el mismo día que la Encuesta de Población Activa te da una bofetada de paro que no la tapa ni tu propio ego; provocar que el juicio de los ERE’s no comience antes de que termine la campaña electoral; manipular el CIS y la Televisión Pública de una manera que queda patente hasta para el menos avispado de los votantes; decir que la solución es que gobierne la lista más votada, cuando tú has hecho hace muy poco justo lo contrario; o negarte a hablar de temas clave como el aumento del paro o la corrupción socialista en Andalucía.
Tanto has jugado a construir realidades paralelas, que incluso la gente de tu partido se ha apuntado al carro sin que tú hayas sido capaz de evitarlo y ayer, el amigo Manuel Chaves, se negaba a hablar en una comisión sobre corrupción en el Parlamento Andaluz, en un comportamiento a imagen y semejanza del secretario general de su partido.
Es muy significativo ver las caras de los representantes del PSOE en Almería, un reflejo de la pesadumbre por la forma en la que su líder nacional está dilapidando la relativa confianza que había recibido. Así las cosas, repito, al PSOE, lo mejor que le puede pasar es que las elecciones sean cuanto antes; a ser posible… hoy mismo.
