VÍDEO BLOG #Miedodequé?: Los ministros, por Víctor J. Hernández Bru.
Bueno, pues ya tenemos gobierno. Ya se conocen los nombres de los 22 socialistas y comunistas que ya están dirigiendo los designios de nuestro país. Y como era de esperar, entre ellos, prácticamente un cien por cien de perfiles sin prácticamente éxitos de gestión y más bien con motivaciones políticas o de apoyo personal a Pedro I El Falso para formar parte de él.
Sin embargo, a pesar de que casi ninguno de esos miembros pasaría el corte para dirigir una pyme, sin duda el elemento más peligroso, el mayor motivo de preocupación es el propio Pedro Chapote, que una vez más, como la pasada semana lo hacía en el proceso de captación de apoyos para su investidura, ha demostrado con la elección de los nombres que su principal, diría que prácticamente su única motivación en el ‘casting’ es su propio interés personal.
Los que ganan poder o al menos mantienen el que tenían son quienes más firmes se han mostrado en el apoyo al líder, además de ‘pasar el corte’ de su vicepresidente segunda, la verdadera ‘controller’ del gobierno, en cuya mano de hierro está el poder de colocar el pulgar hacia arriba o hacia abajo, en función de si el ministrable es o no lo suficientemente afín al comunismo de diseño, al ‘piji-comunismo’ que ella misma encarna.
El núcleo duro, una vez más pasándose El Falso sus propias normas, en este caso el de la paridad, vuelve a estar integrado ya no mayoritariamente, sino de manera única por mujeres Calviño, la propia Doña Rogelia, la invisible Teresa Ribera y ahora también la ‘Chiki-ministra’ Montero: cuatro vicepresidencias y cuatro mujeres. Ni rastro da la tan pregonada paridad. Una muestra más de que, como buenos socialistas y comunistas, jamás practican las normas que ellos mismos dictan.
Junto a ellos, el nombre de la ignominia, el dóberman, el comisario político Félix Bolaños, el tipo que este verano avaló en Mojácar a un investigado por compra de votos, el tipo que ha llevado el peso de las negociaciones para la amnistía y que a buen seguro lo llevará para la autodeterminación. Y para no perder la costumbre de la filosofía de ‘si no quieres caldo, dos tazas’, con la provocación por bandera, bajo el estilo de vida del ‘sujétame el cubata’, al perfil de máximo desafío y ridiculización de la división de poderes y de las atribuciones del judicial, la cartera de Justicia. ¿Alguien da más?
Pues sí: la mayor inútil sanitaria de este país, la única médico que se conoce que haya criticado la apertura de un hospital, la mayor mentirosa sanitaria del territorio patrio con permiso de Juan Antonio Lorenzo y Sánchez Teruel, ministra de Sanidad, cartera en la que se ha tirado cuatro años pregonando una privatización de que la propia izquierda lleva advirtiendo treinta años y que nunca llega en Madrid.
A Pilar Alegría, una sensacional lectora de consignas políticas basadas en el mayor fervor por la mentira, Educación: para que nuestros niños y jóvenes aprendan a que el engaño puede ser una autovía de peaje hacia la mesa de un ministerio; y al tipo que estuvo a punto de darse de leches en un tren con otro señor, en un altercado que provocó él mismo, puesto que el otro tan sólo quería hacerle una pregunta, ¡Transportes! Más o menos como darle ‘Mujer’ a la sexta esposa de un emir. ¡Ah! Y no conviene perder de vista a Sira Rego, la cuota del comunismo radical que Yolanda Díaz tenía que cumplir para desviar la atención sobre la purga a los podemitas. Va a ser divertido ver qué postura toman los morados almerienses ante la humillación a ‘Las Niñas de la Curva’.
En fin, que esto no se acaba: al menos periodísticamente, nos vamos a divertir. Si no… al tiempo.