VÍDEO BLOG #Miedodequé?: Los empadronamientos masivos en casas de socialismos en Níjar y la deriva bolivariana de la izquierda, por Víctor J. Hernández Bru.

Lo anunció esRadio Almería hace diez días y lo corroboró ya de manera oficial el Partido Popular de Níjar ayer, en esta sintonía: el propio PP nijareño ha presentado una denuncia ante la Junta Electoral Central por el empadronamiento masivo y presuntamente irregular de personas que no viven en Níjar, en propiedades de concejales y altos cargos del Partido Socialista.

Entre ellos, ya adelantó esta emisora el caso de asesores de libre designación (a dedo, para quien no lo entienda) con sueldo del Ayuntamiento y de empresarios y trabajadores de empresas que trabajan y cobran del consistorio. Ayer, el portavoz popular confirmaba casos de socialistas en cuyas viviendas hay empadronados hasta más de 20 personas que no viven ni son de Níjar.

Una auténtica vergüenza, una deshonra al sistema democrático de este país, que esRadio Almería tiene confirmada en alguno de los casos, reconocido por los propios protagonistas, que representan una clara sospecha de fraude al proceso electoral, pero que en todo caso, reflejan una conducta absolutamente totalitaria y ajena al cumplimiento de las normas que deberían afectarnos a todos.

Ya no es el caso que me cuentan que ha sucedido en El Puche, de gran cantidad de ciudadanos que, viviendo al lado del colegio electoral y estando el próximo domingo en disposición de acudir a él a depositar su voto, han preferido hacerlo por correo, invitados a ellos por miembros del Partido Socialista.

Insisto, ese caso habría que demostrarlo, pero el de Níjar no; el de Níjar está ya absolutamente demostrado, con el censo en la mano, lo cual constituye una desvergüenza y una deshonra imborrable e insoportable para el partido que se presta a estas prácticas.

Curiosamente, es el mismo partido que ha convertido los plenos de Níjar en un abuso, en una suerte de constantes insultos y descalificaciones a los miembros de la oposición. Ya contamos que la alcaldesa, Esperanza Pérez Felices, y su ‘fiel escudera’ (entiéndase el símil como cada uno quiera), calificaron como “casposo” y “chabanero” al portavoz de Vox en un pasado pleno. Esta pasada semana, la situación ha vuelto a repetirse con ambas, calificándolo como “payaso” y “pin y pon”, metiendo en el saco de la descalificación institucional a su compañero, Juan Montoya y llegando a instar a ambos a que “vayan al psicólogo”, en un vergonzoso ‘juego’ con el delicadísimo asunto de la salud mental.

Níjar se ha convertido, por todo esto y más cosas, como por ejemplo las amenazas laborales a personas que cuelgan en sus redes sonidos de esta emisora o visitas a personas en situación de inmovilidad para gestionar sus votos por correo, en el adalid, en el ejemplo máximo de la ‘bolivarización’ de la política española por parte del social-comunismo, de la falta de respeto a la norma, de la utilización de atajos para conseguir la victoria electoral.

En Níjar urge una limpieza democrática que devuelva a la izquierda a la oposición y al municipio a la senda de la inversión y la mejora tras ocho años de paralización; pero además, urge que nadie olvide el ejemplo de Níjar, como lo que puede ocurrir en cualquier municipio, en el caso de que sus ciudadanos jueguen a hacer la gracia y a poner el gobierno en manos de esta izquierda que no tiene límites.