VÍDEO BLOG #Miedodequé?: La vergüenza de las manifestaciones del 8-M que hacen caer la baba de algunos periodistas y políticos, por Víctor J. Hernández Bru.
Pensaba que ya lo había dicho todo sobre el 8-M este año con mi blog de anteayer. Había felicitado a todas esas mujeres que con su esfuerzo han llegado adonde han querido, sin necesidad de ayudas ni discriminaciones positivas, había denunciado las trolas del feminazismo sobre ausencias de igualdad y techos de cristal y había puesto en dedo en la yaga de cómo la izquierda ha conseguido manipular a los incautos con este absurdo enfrentamiento de sexos.
Pero claro, todo eso lo había señalado, reflexionado antes de que el miércoles, tras terminar la #TertuliaSinComplejos, me fuera a ver con mis propios ojos una de esas manifestaciones. Salí de la emisora y me fui, caminando, a la Rambla, por donde transcurría la convocatoria de la Coordinadora de Colectivos Feministas de Almería, es decir, de los comunistas.
Lo que vi me horrorizó, me ha hecho sentir de verdad el pánico de lo que nos puede ocurrir en las próximas décadas, si continuamos consintiendo que la bazofia más miserable de esta sociedad continúe apropiándose de los colectivos más intelectualmente vulnerables.
Amén de que entre las 500 ó 600 personas que logró reunir esta Coordinadora lo que se imponía, fundamentalmente, era el frikismo, la gente poco o nada productiva, personas que han encontrado en la compañía del comunismo un muro de las lamentaciones en las que volcar sus desgracias personales, lo que realmente me horrorizó fue la utilización de los menores.
Sosteniendo la pancarta de dicha Coordinadora, cuya imagen puede verse junto al texto de éste #VídeoBlog, puede observarse a diez personas, ocho de ellas claramente menores de edad, algunas de ellas que no pasan de ser unas niñas de 12 ó 13 años. Esto es en lo que se ha convertido el comunismo, la extrema izquierda, si es que no es lo que ha sido siempre: gentuza miserable y peligrosa que no se paran en barras, que no lo hicieron durante la Segunda República y la Guerra Civil, cercanos y amigos del terrorista y del golpista, amigos de la violencia justificada por cualquier motivo y sin vergüenza ninguna a la hora de manipular y utilizar a menores de edad para participar en una reivindicación que ni entienden ni es propia de esas edades.
Ayer, un compañero periodista firmaba una crónica de esta vergüenza sin siquiera relatar esta indignidad del manejo de menores en una causa política, centrándose en que lo que él llama el ‘nuevo feminismo’ había goleado a la otra manifestación del 8-M. Es lo que tenemos y ése es precisamente el peligro, la tolerancia, la connivencia, la defensa de esta gentuza por parte de gentes aparentemente normales, aparentemente de bien.
En otra manifestación, en Madrid, la repugnante secretaria de estado de Igualdad, Ángela Rodríguez ‘maza-Pam’, organizaba un vídeo para que otras menores cantasen lamentando que la madre de Santiago Abascal no hubiera abortado. A ‘maza-Pam’, que posteriormente borraba el vídeo de sus redes porque ‘elles’ son así de cobardes y miserables, le preguntaron ayer por el episodio, pero como también es costumbre, dio un rodeo para no entrar en el tema.
En Extremadura, al ministro de la Presidencia, el mentiroso y teatrero Félix Bolaños, también le pidieron su opinión sobre el tema. Su respuesta fue poner el acento en lo que él llama “un día festivo”, para no tener que reprobar el comportamiento de su compañera de gobierno.
Los demás, la gente de bien de este país podemos seguir mirando para otro lado ante el avance de quienes pretenden romper la convivencia normal y ordenada de este país o empezar a tomar medidas de verdad.
