VÍDEO BLOG #Miedodequé?: Miguel Ángel Blanco, Pedro I El Falso, el PSOE, los socialistas almerienses y el contenedor de los desechos políticos, por Víctor J. Hernández Bru.
Aunque pudiera parecerlo, no es un concurso de indignidades ni repugnancias varias. Se trata del estado natural de nuestro presidente del gobierno, Pedro I El Falso, quien no ha dudado en ningún momento a la hora de acudir al homenaje a Miguel Ángel Blanco en los 25 años de su asesinato ruin y cobarde, a pesar de haber estado negociando y firmando un acuerdo, la pasada semana, con el partido que justifica los asesinatos de ETA, incluido el del propio Miguel Ángel, y defiende y exalta a los verdugos.
En su estado natural de convencimiento de ser el único rastro de vida inteligente en el planeta, El Falso anda seguro de que puede estar una semana firmando con asesinos y a la siguiente consolando a víctimas, sin que a nadie le resulte extraño el asunto.
Pero como, además, como es consustancial a un socialista, en la cabeza de Pedro I El Falso hay un cacao que para qué las prisas, el tipo sigue queriendo contentar a víctimas y verdugos, siendo equidistante e indiferente a ambos, y para que los asesinos del tiro en la nuca y la bomba lapa y sus herederos no se enfaden, ha ido allí, al homenaje al que asesinaron hace un cuarto de siglo por defender la unidad de España para decir que no hay tal unidad de España, sino que España y Euskadi son dos países.
¿Puede haber más indignidad, más miseria, más cara dura, que la de ir al homenaje de un asesinado por gente que lo que pretendía era la independencia de un territorio y dar por sentada dicha independencia en tal acto?
Pues ojo que, seguramente, la mayor indignidad, la mayor miseria, la mayor cara dura no sea sólo para con el homenajeado y su familia, sino para los españoles en general, porque este tipo quiere convencernos de que España no es España, que es un trozo de España; que lo ha sido siempre, que la historia no contempla desde el siglo XV un territorio español unido o que España es Francia, o Yugoslavia o Senegal.
Y mientras tanto, los socialistas de España, o los de Euskadi y España, y los de Segovia, y los de Murcia, y los de Alpedrete y también los de Almería, siguen con la boca callada, mientras su líder sigue destrozando el partido a marcha forzada, ganándose un resultado como el de Andalucía y perdiendo el norte mientras pierde el centro y cualquier atisbo de raciocinio político, pactando con golpistas independentistas e independentistas etarras, rehaciendo la historia a gusto de éstos y destrozando la economía de este país.
¿Hasta cuándo, Juan Antonio? ¿Hasta cuándo, José Luis, Adriana, Antonio, Noemí… hasta cuándo? Obviamente, a Sobalecio y a Fernando no les pregunto, porque en su caso, ese hasta cuándo se responde con el momento en que ellos dejarán de ser el maniquí que luce en el escaparate para ubicarse en el contenedor de los desechos políticos… de donde nunca debieron salir.
