VÍDEO BLOG #Miedodequé?: Oltra, Darias, María Jesús Amate: razones por las que ya casi nadie cree en la izquierda, por Víctor J. Hernández Bru.
Mientras pagas la luz más cara que nunca y el combustible lleva camino de los tres euros el litro, a la par que el gobierno de Pedro I El Falso se da golpes de pecho con planes para solucionar el desastre de país que ha construido y que tan sólo consiguen empeorarlo, se acaba la campaña electoral a las andaluzas.
Y el resultado es un batacazo de las izquierdas al que, para encontrarle parangón, hay que acudir a los libros de historia… del siglo pasado. Y como vengo diciendo, el motivo del leñazo no es otro que la caída de esa venda que muchos han tenido puesta durante años y décadas y que, a base de mentiras al descubierto, de desastrosas gestiones económicas, de la corrupción más miserable y repugnante y de la comparativa con gobiernos que no son de izquierdas, ha quedado abandonada en el suelo.
Tan sólo en un día, sea éste el que sea, encontramos innumerables ejemplos que justifican la caída de todos los partidos de la izquierda en éstos y, presumiblemente, en los venideros comicios. Insisto, da igual el día y el partido al que nos refiramos: no pasa una sola jornada sin que los ejemplos se multipliquen hasta obligarnos a elegir cuál de ellos nos parece más relevante.
No cabe duda de que una de las estrellas, por no decir la estrella del fango de la izquierda en este mes es Mónica Oltra, esa vicepresidenta comunista de la Generalidad Valenciana que llegó al poder exigiendo dimisiones por allá y por acullá, para erigirse como la ‘doña limpia’ de la política valenciana. Para ella, Paco Camps tenía que dimitir porque estaba imputado por haber aceptado unos trajes, aunque luego se demostró su inocencia en los tribunales; y Rita Barberá porque sí, ya que nunca llegó a esta imputada. Esa misma señora, ha de sentarse ahora en el banquillo de los acusados por un presunto delito de encubrimiento a su ex marido, a su vez imputado por un delito de presuntos abusos sexuales a una menor de catorce años, internada en un centro de acogida. Los hechos no pueden ser más repugnantes… o sí; puesto que la tipeja en cuestión se niega a dimitir y culpa de sus males a una conspiración de la extrema derecha.
No mucho más alto ha volado la ministra socialista de Sanidad, que por la mañana anunciaba en la Sexta, que es la nueva sala de prensa de la portavocía del Gobierno, que habrá cuarta vacuna para todo el mundo, aunque por la tarde su propio Ministerio tenía que matizarla y que anunciar, más o menos, que era broma. No estaría de más llevar la cuenta de las rectificaciones que lleva este Gobierno desde que la diosa fortuna nos castigó con su llegada.
Sin salir de la Sanidad, pero en el ámbito doméstico, la número uno de la lista de Por Andalucía al Parlamento Andaluz, la comunista de diseño María Jesús Amate, se ha cubierto de gloria por tres días consecutivos: primero anunciando en Interalmería que el PP había cerrado uno de los dos hospitales geriátricos de referencia en Andalucía, en referencia al de la Cruz Roja. A pesar de que Antonio Felipe Rubio le advertía del grosero error, ya que dicho ruinoso centro, cuyos servicios se hubieron de trasladar a Torrecárdenas, ampliados, modernizados y además gratis y no pagando el alquiler de la ruina en cuestión, no era un geriátrico sino un hospital de cuidados paliativos, al día siguiente, la zote en cuestión perseveraba en el error, ahora ya en rueda de prensa. Al tercer día, en lugar de resucitar de su cósmica ‘cagada’, preguntada por Icíar Carballo si quería rectificar, lo que hizo fue ratificarse en la metedura de pata, para que quede claro que no tiene ni repajolera idea de lo que se hacía en dicho centro ni tampoco de lo que es un hospital geriátrico.
¿A alguien le cabe duda de las razones del desplome de la izquierda en las Andaluzas, en las anteriores citas electorales y también en las que están por venir?
