Manuel de la Fuente ha achacado la falta de inversión a problemas técnicos con las empresas adjudicatarias de las obras del AVE y a la herencia recibida del anterior gobierno.
El subdelegado del Gobierno en Almería, Manuel de la Fuente, ha presentado este viernes en rueda de prensa los Presupuestos Generales del Estado y las inversiones que van a llegar a Almería en una comparecencia llena de ataques a la oposición y en cuya ronda de preguntas no se ha respondido a si la provincia va a contar en el nuevo ejercicio con todo el dinero que se prometió y nunca llegó: «Yo no soy un experto en técnica presupuestaria […] Yo creo que en la administración es muy normal los reajustes presupuestarios. Los presupuestos contienen números y esos números están avalados, ahora, a lo largo del año se hacen modificaciones presupuestarias», justifica De la Fuente.
El representante del Gobierno ha justificado la pobre inversión en materia ferroviaria que se ha dado en este ejercicio en que las empresas adjudicatarias pidieron revisar los contratos debido al aumento de los costes: «Igual si se hubiera hecho la obra a la velocidad que estaba prevista hubiéramos llegado a un cuarenta, cincuenta, sesenta por ciento. La realidad es que la evolución de las relaciones contractuales y el propio desarrollo de las obras impidió hacerlo».
Manuel de la Fuente ha afirmado que el compromiso del Gobierno se manifiesta en que «somos la provincia inversora por habitante más alta de Andalucía» pero poco va a servir esto si, al igual que en el actual ejercicio, no se ejecuta la mayor parte del presupuesto. A pesar de todo, el Subdelegado del Gobierno ha cargado contra la prensa y contra la oposición por tildar de «estafa» estos presupuestos.
Desde la prensa, se le ha preguntado a Manuel de la Fuente por la «irrelevancia» respecto a la fecha de la llegada del AVE que él mismo dijo que se daba en la rueda de prensa de los Presupuestos Generales del Estado del año pasado y ha justificado que no se refería la cuestión presupuestaria ni de plazos, si no que «en una obra tan compleja, la de mayor inversión y mayor impacto para su futuro, se tardara un año más o un año menos».
