VÍDEO BLOG #Miedodequé?: ‘Doño Ireno’, la violencia de género, los talibanes y los órganos sexuales del tamaño de una mesa, por Víctor J. Hernández Bru.
Ha salido a la palestra, la ministra ‘Ireno Montera’, para hablar de Almería. En sus más de dos años de gobierno, no había tenido tiempo de hacerlo aún, no se había preocupado por ninguno de los problemas de los almerienses, no había encontrado el momento de preocuparse por nada de lo que nos acucia: ni por la falta de agua, ni por la competencia desleal de terceros países a nuestra agricultura, por las carencias infraestructurales, los retrasos y paralizaciones en el AVE, los precios desorbitados de los vuelos, la llegada masiva e ilegal de inmigrantes, el estado ruinoso en que están muchos negocios de hostelería, la crisis del turismo… nada de nada; ninguno de ésos u otros problemas había sido tan importante como para merecer la atención de la señora ministra de Igualdad.
Y ahora tampoco. Ahora tampoco se ha referido a nada que realmente afecte al común de los almerienses. Sus palabras, repito, sus primeras palabras como ministra y en referencia a Almería ha sido para ponernos como ejemplo de ese concepto antidemocrático e inexistente que ellas, las feminazis, llaman violencia machista, cuando en realidad se refieren a violencia de género.
Para ‘doño Ireño’ España no es una democrática en tanto en cuanto siga habiendo violencia de género y lo ha dicho con motivo de un presunto caso detectado y denunciado en Almería. Y digo presunto porque aquí, en esRadio Almería, seguimos respetando la presunción de inocencia y, cuando informamos o analizamos un delito, seguimos hablando de presunto, como se ha hecho en los medios toda la vida hasta que llegó este feminazismo estructural y oficial, que gracias a la ilegal Ley Integral de Violencia de Genero de Zapatero en 2004, convierte a los denunciados por tal motivo en culpables.
Legalmente, constitucionalmente, procesalmente, ni siquiera el acusado de este caso, que ha confesado los hechos, pierde su condición de presunto hasta que no es juzgado y condenado; pero vamos, que hablar de leyes o de cualquier otro elemento que requiera de la más mínima comprensión lectora a este individuo es exactamente lo mismo que proponer a una piara un menú compuesto por bellas flores.
En todo caso, la señora ‘Montera’ reitera que la violencia contra la mujer, que ella imagina en todos lados, en una mirada, en un gesto, en un sueldo, en un cargo o incluso en un piropo siempre y cuando éste no se refiera a su propio órgano sexual, comparado con una mesa, es el motivo por el que España no es una democracia. Queridos españoles, no sé qué esperamos para acudir a Afganistán para que los talibanes nos muestren el camino hacia la democracia, como también proclamó esta reconocida y reputad intelectual en otra de sus lecciones magistrales sobre geopolítica internacional.
