Para el diputado autonómico de VOX , es “como consecuencia de la agricultura desleal que están sufriendo nuestros agricultores” a través de terceros países.
Este viernes, Rodrigo Alonso, diputado autonómico de VOX, ha visitado el mausoleo romano del Daymún, en El Ejido, donde ha puesto en alerta acerca de una problemática que se antoja eterna, ya que “estamos asistiendo a un preentierro de la agricultura en Almería, como consecuencia de la agricultura desleal que están sufriendo nuestros agricultores, esta mañana hemos estado en una explotación de pepino que lleva un control biológico de las plagas, donde no utiliza fitosanitarios y que tiene unos costes de producción de unos 30 céntimos. Sin embargo, está vendiendo a 10-12 céntimos”.
Así, “este agricultor, como todos los agricultores, nos expresa el desánimo que tiene y la desprotección que siente, ya que están viendo que entran productos de terceros países, concretamente de Marruecos, donde no existe un control fitosanitario tan exigente como el que se les exige a nuestros agricultores, donde no se está produciendo un reetiquetado de productos y que las administraciones están mirando hacia otro lado”.
Cabe mencionar que, “en este caso, hay que señalar a la Junta de Andalucía, la cual, teniendo la competencia del reetiquetado, presume de hacer inspecciones, de que tiene expedientes sancionadores a empresas que realizan el reetiquetado, pero nos llama la atención que no publique esos datos”, ha mencionado Alonso.
No ponerse de perfil
Desde la formación verde abogan por que “tenemos que señalar a aquel o a aquella empresa o explotación que reetiquete los productos que vienen países terceros, entre otras cosas, porque es ilícito y porque el nivel de exigencia para los productos en el campo almeriense en cuanto al uso de fitosanitarios es altísimo, y el nivel de exigencia en esos países es muy bajo”.
Y es que el parlamentario entiende que “el reetiquetado pierde la trazabilidad del producto, con lo cual, podemos estar asistiendo en breve alguna alerta sanitaria porque no controlamos cuál es el cuidado y cómo se ha producido ese producto en esos países, y eso se le añade también al incremento de los costes de producción en lo que se refiere al uso de la mano de obra”.
Precisamente, “en esos países estamos hablando de 60-70 céntimos la hora, cuando aquí se está pagando a un trabajador en torno a 7 u 8 euros la hora, con lo cual, con ese escenario, la ruina del campo almeriense ya está servida, no llegan ya solamente a cubrir costes sino a obtener una mínima rentabilidad y la Junta de Andalucía está mirando hacia otro lado”.
“No está haciendo los controles fitosanitarios que debe realizar, no solamente a los productos de terceros países en la frontera sino también a los supermercados, porque no hay que perder de vista que están comprando un producto que viene de terceros países”, indicando el miembro de VOX que “esta mañana teníamos en nuestras manos pepinos de una extraordinaria calidad que, en las subasta, están a 10-12 céntimos. Sin embargo, vamos a un supermercado con un pepino que aquí prácticamente sería un deshecho, y se está pagando a un euro, un euro y medio el kilo, y luego no sabemos de dónde viene”.
Más control a terceros países
Visibilizando esta problemática, en las filas verdes “queremos hacer un llamamiento, exigirle al presidente de la Junta de Andalucía que ponga en valor el producto de aquí, de la tierra, el producto español, el producto agrícola de la tierra almeriense, y que lo ponga en valor por su extraordinaria calidad y los beneficios que tiene para la salud, porque esos de países terceros no sabemos el tratamiento que han tenido. Seguimos exigiendo que se hagan todos los controles que se deben realizar”.
Según ha apuntado Rodrigo Alonso, “la Junta de Andalucía acordó con VOX crear una oficina específica para el control de denuncia del reetiquetado, también acordó con nosotros aumentar la inspecciones en fitosanitarios, pero todo se está haciendo con muy poca transparencia, no se sabe a quién se está investigando, a quién se les están abriendo esos expedientes. Exigimos transparencia”.
De cara a poner fin a esta lacra, el representante almeriense autonómico ha sentenciado que “aquel que utilice de forma fraudulenta el reetiquetado hay que señalarlo y castigarlo, y la población tiene que saber que cuando vaya a un supermercado a comprar, que compre un producto español, porque no comprarlo no te garantiza que tengas en tus manos o que lleves a tu casa o les des a tus hijos un producto de calidad, te estás exponiendo a que venga un producto contaminado y con las consecuencias que tiene para los beneficios de la salud”.
