Ambos varones están investigados por un delito de tentativa de homicidio y otro de incendio
El Juzgado de Instrucción número 4 de Almería en funciones de guardia ha acordado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de los dos hombres detenidos por provocar supuestamente el incendio en el poblado chabolista de Los Albaricoques en Níjar (Almería), que dejó un herido.
Fuentes del TSJA han indicado que ambos varones están investigados por un delito de tentativa de homicidio y otro de incendio, de modo que la causa será remitida al Decanato para su reparto de forma que sea instruida de cara a depurar responsabilidades penales.
Los datos preliminares de la investigación abierta por la Guardia Civil apunta a que los dos detenidos actuaron movidos por la «venganza» después de protagonizar un altercado en el poblado, lo que habría dejado sin infravivienda a unas 200 personas.
Según las pesquisas, ambos hombres habrían acudido antes de que se desataran las llamas a un club de alterne localizado en el asentamiento, más conocido como ‘Walili’, y una vez allí se habría producido un incidente que les habría obligado a marcharse.
Después habrían regresado al poblado, en el que provocaron presuntamente el incendio de manera intencionada en la zona donde residen los trabajadores inmigrantes de origen subsahariano, lo que causó heridas de gravedad a un varón de 45 años que fue hospitalizado debido a quemaduras en los miembros inferiores, por lo que fue trasladado a Granada.
La investigación señala que el punto de ignición del fuego, que se inicio a las 23,45 horas del sábado, fue una de las chabolas y no la infravivienda que sirve de club de alterne. En la zona resultaron afectadas un centenar de chabolas situadas en un área próxima al cruce de las carreteras AL-3108 y AL-3112, donde residen de forma habitual entre 600 y 800 personas.
Los servicios de emergencia procedieron a la evacuación al completo del poblado y el fuego quedó extinguido inicialmente sobre las 3,00 horas, pero posteriormente se reavivó. Endesa tuvo que proceder al corte de la electricidad por desprendimientos de cables de alta tensión en el asentamiento, que se extiende sobre una superficie de 8.000 metros cuadrados.
