Las cifras recogidas por la Junta de Andalucía durante este periodo estival muestran el gran interés de la zona para los turistas pese al complicado contexto generado por la pandemia.
Las playas del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar (Almería) situadas a poniente de la barriada de San José, desde la Bahía de Genoveses hasta Cala Carbón, con acceso restringido de vehículos a motor han registrado la entrada de 30.172 vehículos desde el 1 de julio hasta el 15 de agosto.
El acumulado desde que entró en funcionamiento el 13 de junio se eleva a 36.940 vehículos, lo que, según la estimación hecha desde la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible calculando tres ocupantes por turismo, han visitado estas calas y playas de alto valor ecológico, geológico y paisajístico alrededor de 110.800 personas.
Fuentes del Gobierno andaluz han indicado que, de acuerdo al recuento llevado a cabo por la empresa encargada de gestionar el acceso a este espacio, se han contabilizado durante el mes de junio 6.768 vehículos que ha derivado en el acceso de unos 20.304 usuarios a Genoveses, el Barronal o Mónsul.
Por su parte, este servicio integral, que además de controlar el acceso de vehículos a motor y ordenar el tráfico también desempeña labores de mantenimiento del ecosistema natural e información medioambiental, registró en el mes de julio un total de 19.421 vehículos, los que se traduce en la entrada de alrededor de 58.263 personas.
Los datos hasta el 15 de agosto de este año suman otros 10.751 vehículos y un cálculo de unos 32.253 visitantes. Cabe recordar que para esta temporada, a diferencia de los dos últimos años en los que la Junta asumió «importantes costes», se ha recuperado el cobro de entrada a los vehículos a motor con un precio de cinco euros en horario regulado de 9,00 a 20,00 horas diariamente. Además, se ha puesto en marcha un control de gálibo de 2,4 metros de altura para autocaravanas y vehículos de gran tamaño.
El servicio de información medioambiental y de conservación, control de acceso y ordenación de vehículos a motor permite controlar mediante una barrera el tráfico diario a las playas, que cuentan con espacios de aparcamiento para casi 400 vehículos en rotación, así como evitar «colapsos» y mantener despejadas las salidas ante posibles emergencias.
Durante el pasado año, según el registro de la Junta, fueron un total de 204.264 personas las que visitaron las playas de acceso restringido durante el periodo de limitación, que se extiende a la primera quincena de septiembre, lo que supuso un total de unos 10.600 usuarios menos que durante 2018.
