VÍDEOBLOG #MIEDODEQUÉ?, por Víctor J. Hernández Bru
Diario del #Covid19, día 79. Un vicepresidente macarra que miente e ignora la ley (VÍDEO BLOG #MIEDODEQUÉ?)
“¿Está usted llamando a la insubordinación de los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado?”
Las palabras se pronunciaron ayer en el Congreso de los Diputados y su responsable bien podría ser un chulo de playa, un mentiroso, un matón de discoteca; o bien puede haber sido todo eso y además vicepresidente del Gobierno.
Pablo Iglesias, el Coletavirus, es un mentiroso redomado, un manipulador de cuarta y, además, un ignorante. Ayer, en la sede del poder legislativo, se escandalizaba porque el PP y Vox afirmaban que los Guardias Civiles están absolutamente obligados por la Ley a desobedecer órdenes que constituyan actos ilegales.
Si el Coletavirus no fuera un ignorante mayúsculo, sabría no sólo la Guardia Civil y el resto de cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, sino incluso cualquier civil estamos absolutamente obligados a incumplir cualquier orden que constituya una ilegalidad. Para que nos pueda entender incluso alguien tan básico como el vicepresidente, si un Policía Local nos ordena pegarle cuatro tiros a nuestro vecino del quinto, evidentemente nuestra obligación es desobedecerle.
El escándalo de la Guardia Civil se fundamenta en que el ministro Marlaska pidió al número 1 de la Benemérita en Madrid que le filtrase el contenido de un informe solicitado por la juez, algo que, de haber hecho el representante de la Guardia Civil, habría supuesto la comisión de un delito.
Al negarse, Marlaska tuvo un ataque de cuernos y se lo cargó, lo cual más que solucionar nada, agravó el caso, ya que horas después le dimitía el número 2 del cuerpo, no porque se quisiera jubilar un mes antes de lo previsto como ha mentido ridículamente el ministro, sino porque no estaba dispuesto a seguir bajo las órdenes de un ministro que se conduce así, no ya un mes, sino un minuto.
Ayer, el escándalo siguió creciendo con el adiós del número 3 de la propia Guardia Civil, pero ni el ministro piensa dimitir ni sus dos presidentes del gobierno destituirlo, porque para esta gente no hay nada que ellos puedan hacer sea cuestionable.
Eso sí, luego el Coletavirus se enfada mucho porque Álvarez de Toledo le recuerda que su padre estuvo procesado por pertenencia a un grupo terrorista como el FRAP, en respuesta al desprecio del vicepresidente por su origen noble. Ya sabíamos que, con Iglesias, el nivel en las Cortes iba a descender de manera alarmante, pero llegar a una vulgar reyerta callejera no era lo que esperábamos: macarra, mentiroso y además ignorante de la ley.
