VÍDEO BLOG #MiedodeQué?, por Víctor J. Hernández Bru.
Le parece un buen regalo de Reyes, a Andoni Ortúzar, el acuerdo para investir presidente a Pedro Sánchez; seguramente algo tendrá que ver el que el candidato socialista le ha entregado al PNV y al País Vasco todo lo que éstos han pedido, desde el control del tráfico hasta una llave maestra de La Moncloa.
Dice Pablo Iglesias que con este acuerdo de investidura se va a poner fin a una pésima década, aunque ésta ha tenido sus cosas buenas, por ejemplo, el Movimiento 15 M; no quisiera sospechar que, para él y su señora, lo mejor de ese Movimiento haya sido pasar de vivir en un pisito en Vallecas y dar cuatro clases en la Universidad a convertirse en el dueño de una mansión y en el dueño de las decisiones del presidente del Gobierno.
Y Esquerra, que había dicho que decidiría si apoyaba la investidura en función de lo que afirmara la Abogacía del Estado, tampoco ayer, cuando habló esta institución, nos ha terminado de aclarar si Sánchez cuenta o no con sus votos; es más, ha emplazado al jueves a un Congreso o algo así, donde ya sí se supone que contarán el sentido de su voto.
Como puede verse, aquí, lo que viene siendo sentido de Estado y cierto miramiento por lo que va a ser el futuro de los españoles no sobra.
Ah, perdón: que se me escapaba uno de los protagonistas; y qué protagonista. El presidente de todos los españoles es ese señor que pidió la dimisión del anterior presidente por el fallo del caso Gurtel, pero que cree que el de los ERE es cosa del pasado; es ese señor que prometió convocar elecciones al día siguiente de su moción de censura, pero se apoltronó en La Moncloa hasta que pudo; que afirmó que no pactaría nunca con independentistas y pro-etarras y lo ha hecho en cuanto los ha necesitado; que dijo que no podría formar gobierno con Podemos porque ello le supondría insomnio, y ahora está a punto de dejar embarazado al líder de este partido de tanto abrazo; que, en definitiva, se hizo famoso por ese absurdo del ‘no es no’ y que ahora critica a quienes no le apoyan, acusándolos de bloquear el país.
Pensándolo bien, dicho todo esto, ahora me parce que el resto de implicados de este sainete son grandes hombres de Estado en comparación con el protagonista principal.
