Loly Cruz: “Los senderos son de vital importancia en los pueblos pequeños por dar a conocer todos los rincones naturales”.
El programa provincial de Rutas y Senderos 2019 de la Diputación de Almería ha premiado al Ayuntamiento de Cantoria por la puesta en valor de las rutas senderistas potenciadas en este municipio, como el trazado de La Jata o el denominado PR-A 48, ‘Las Lomas’, y que recientemente ha entrado en servicio. Señalizaciones, adecuación del camino y la generación de un recorrido que lleva a rincones de especial interés paisajístico han hecho merecedora del galardón a la capital histórica del Valle del Almanzora, por el especial interés puesto desde su equipo de Gobierno en la potenciación de esta actividad deportiva y social que permite una mayor visualización del interior de la provincia de Almería.
El premio fue recogido por Loly Cruz, concejala de las áreas de Juventud, Deportes, Comunicación, Asuntos Sociales, Igualdad y Género, en la gala de clausura del programa ‘Rutas y Senderos 2019’ de la Diputación Provincial de Almería. El acto sirvió, además, para reconocer a aquellos senderistas que han superado los distintos retos de esta disciplina a lo largo del año. “Los senderos son de vital importancia en los pueblos pequeños por dar a conocer todos los rincones naturales que de otra manera no se conocerían”, afirmó Cruz durante su intervención en el acto.
Este año han sido más de 3.500 personas las que han participado en actividades dentro del programa de senderismo provincial y desde el Ayuntamiento de Cantoria se ha hecho una decidida apuesta por este movimiento deportivo y social que en pocos años se ha convertido en una importante fuente de visitas al valle del Almanzora.
El recorrido, cuyo valor ha sido reconocido por los senderistas almerienses, discurre a lo largo de casi cinco horas por diversos cortijos y caminos que muestran tanto el casco urbano de Cantoria como un pequeño puente que servía para pasar el agua de un lateral a otro de la Vía Verde del Almanzora además de recorrer cortijos y ruinas, algunas de ellas señas de identidad de la arquitectura antigua del s XIX. A nivel botánico, permite observar la típica vegetación de ribera en los trozos de ramblas así como plantaciones de cítricos, propias de la zona.
